entra, pero por favor, después no salgas
es que uno se acostumbra a los colores,
a la paz de tu belleza
a la armonía del refugio de tu piel
no me acostumbro a acostumbrarme a mirarte
constantemente
los labios que una vez me sorprendieron
a mi
sorprenderán al mundo
hasta después de tu muerte
porque yo te hice eterna en mis imágenes
y no nos engañemos, se trata de arte, no de amor
y no nos engañemos, se trata de amor, no de arte
no nos engañemos
ya entraste
y ya te fuiste
para siempre
cerca mío
que bonito...
Siempre es bueno entrar,
sobre todo
si llueve.